Este departamento era originalmente un monoambiente. Se reestructuró completamente el layout para convertirlo en una unidad de dos ambientes.
Los clientes son una pareja joven que estudia y trabaja. Vivían en un monoambiente y la llegada de la pandemia los impulsó a repensar su hogar. Notaron la importancia de tener una el dormitorio separado, un espacio que resolviera las necesidades de home-office, un balcón, mucha luz natural, plantas y un diseño funcional que los ayudara a mantener el orden.
El proyecto se estructuró en base a estos lineamientos, utilizando el equipamiento fijo como elemento que articula y vincula los espacios. Se logró una cocina completa semi-integrada y muy luminosa, un dormitorio con un gran placard, un estar-comedor amplio que incluye un gran escritorio, espacios de guardado customizados especialmente y mucha luz natural.